Por ejemplo, trate de mejorar su tiempo de carrera gradualmente en lugar de esperar ganar el maratón directamente.
Por ejemplo, en lugar de decirte "No soy lo suficientemente bueno para…", di, "Estoy haciendo lo mejor que puedo” o "estoy trabajando para dar lo mejor de mí".
La gente no nota las cosas que vemos en nosotras mismas que odiamos así que ¿por qué dirigirlos a ellas? Vivir con tus defectos no significa que debas contarle a la gente sobre ellos".
O puedes intentar conectar tus pensamientos con tus valores fundamentales, llegando incluso a agradecer a tu crítico interior que te los haya hecho notar.
Ahora que ya lo vas teniendo más claro, 10 presente que cada vez que tu crítico interior te habla es una señal de que estás actuando o vas a actuar, inconscientemente, bajo un sistema de reglas internas que acogiste en el pasado, ya sea de tu familia o de tu entorno cultural.
La autocompasión reconoce que no estamos solos en nuestras luchas. Todos somos parte de una experiencia humana colectiva, con vulnerabilidades y desafíos compartidos. Comprender que otros enfrentan dificultades similares puede aliviar los sentimientos de aislamiento y autocrítica.
No se trata de un ejercicio de egocentrismo, sino que su objetivo es encontrar una actitud más amable y honesta hacia uno mismo.
5. Síndrome del impostor: El síndrome del impostor, el sentimiento de ser un fraude o indigno de sus logros, a menudo es alimentado por el crítico interno. Cuando estás a punto de lograr un logro significativo, tu crítico interior puede intervenir con pensamientos como "No te mereces esto" o "No tienes tanto talento como los demás". Esto puede llevarle a restar importancia a sus logros y a dudar en aprovechar nuevas oportunidades.
" Al examinar estos pensamientos, como al cuestionar la validez de la afirmación del crítico interno sobre las propias capacidades para correr, podemos comenzar a desmantelar su poder.
Recuerde, el objetivo no es eliminar al crítico interior sino transformarlo en un aliado en su viaje hacia la autodisciplina.
Nuestro crítico interior puede ser una voz cruel y profundamente dañina. Su fuerza e impacto determinan nuestro bienestar mental normal. La voz destructiva en nuestras cabezas nunca se satisface y puede deshonrar y dañar cualquier cosa que podamos lograr, sin importar cuán impresionante sea.
Este cambio transforma el conflicto interno en claridad y el miedo en guía. Eso es crecimiento consciente y compasivo.
El cuestionador: este crítico interno siempre cuestiona nuestras habilidades, lo que provoca sentimientos de inseguridad y baja autoestima.
Diferenciar la voz interior es basic para interpretar esos pensamientos en segunda persona. Es decir, ante pensamientos como “nunca podré hacer nada bien” hay que replantear inmediatamente el pensamiento y modificarlo -siguiendo el ejemplo anterior- por click here algo como “no se puede hacer nada bien”.